miércoles, 29 de abril de 2015

UGT Y CCOO RECUERDAN A LOS VEINTE MUERTOS EN ACCIDENTE LABORAL DE 2014

Los delegados sindicales de UGT y CC OO se concentraron ayer en la plaza de Santo Domingo de Murcia para recordar a los 20 trabajadores de la Región fallecidos en 2014 en accidente laboral, en conmemoración del Día Internacional de la Seguridad y la Salud en el Trabajo. El homenaje consistió en la colocación de un lazo negro y un clavel rojo por cada uno de los veinte murcianos que murieron en el tajo o camino de su trabajo. El secretario general de UGT, Antonio Jiménez, y el presidente de la gestora de CC OO, Carlos Bravo, criticaron el aumento de la siniestralidad que se está produciendo en las empresas murcianas y el desvío de los trabajadores con enfermedades profesionales a la sanidad pública, en beneficio de las mutuas. Durante el año 2014 se registraron en la Región 101 accidentes laborales al día. La jornada se inició con una asamblea de delegados celebrada en la sede de UGT, en la que intervinieron Encarna del Baño, secretaria de Empleo, Acción Sindical y Salud Laboral de UGT, y Julio López Pujalte, responsable de Salud Laboral de CC OO.
Los participantes en la asamblea salieron después en manifestación hacia la plaza de Santo Domingo, donde se celebró la tradicional concentración en recuerdo de los trabajadores víctimas de la siniestralidad laboral.
El pasado año perdieron la vida en la Región 20 personas, 15 en su puesto de trabajo y el resto a la ida o la vuelta de su empresa. En el primer trimestre de 2015 se han registrado ya cuatro accidentes mortales, uno de los cuales fue ´in itínere´, a la ida o a la vuelta del trabajo.
Entre enero y marzo se han producido 8.942 accidentes de trabajo, lo que supone 99 cada día.
En 2014 se contabilizaron 36.974 accidentes de trabajo, 720 más que en 2013, lo que equivale a 101 siniestros diarios. 
Estos son algunos de los datos incluidos en el decálogo elaborado por los sindicatos convocantes en vísperas de las elecciones autonómicas y municipales con el propósito de que los partidos políticos tengan presente el coste de la falta de prevención y la necesidad de apostar por «el empleo estable y de calidad». La conmemoración del Día Internacional de la Seguridad y la Salud en el Trabajo coincidió este año con el vigésimo aniversario de la promulgación de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, aunque los máximos responsables de UGT y CC OO sostienen que «el balance de 2014 arroja un balance muy negativo». Antonio Jiménez explicó que este año quieren «denunciar el proceso de desregulación en el ámbito de la prevención de riesgos laborales, así como la generalizada disminución (y en algunos casos desaparición) de los recursos públicos que se destinan a la salud laboral. De hecho, la llamada Estrategia Regional de Empleo aún no ha sido refrendada por las organizaciones sindicales y no ha visto la luz por la inexistente dotación presupuestaria», explicó.
El empeoramiento de las condiciones socioeconómicas y laborales que, según los dirigentes sindicales se está produciendo en la Región, «se traduce en un índice de incidencia de 3.70, frente al 3.33 de la media nacional. Bajo el pretexto de aliviar a las empresas de las cargas administrativas que conlleva la legislación que protege la salud de los trabajadores, las políticas europeas están entrando en una peligrosa senda de desregulación», dijo Carlos Bravo. Los máximos responsables de UGT y CC OO criticaron «la prevención de riesgos laborales y la actitud de las mutuas». El secretario general de UGT dijo que «parece ilógico que sean las propias entidades obligadas a reparar el daño, las mutuas, sobre las que pesan las obligaciones del registro de enfermedades profesionales, las que estén falseando las cifras. Por eso le pedimos un mayor esfuerzo a las administraciones»
Bravo acusó a estas entidades de «desviar a los trabajadores con enfermedades profesionales al sistema público», incrementando el gasto de la Comunidad.
NOTICIA EXTRAÍDA DE www.laopiniondemurcia.es  29/04/2015

martes, 21 de abril de 2015

JUZGADO POR UN ACCIDENTE LABORAL QUE DEJÓ SIN PIERNAS A UN EMPLEADO.



El juzgado de lo Penal número 3 acogió ayer el juicio contra el jefe de taller de una empresa de radiadores donde en 2008 explotó un compresor que dejó sin piernas a un empleado. 

Durante la vista, el jefe de taller aseguró que en aquel momento se encontraba de baja laboral tras haberse cortado en una mano poco después de haberse reincorporado tras el fallecimiento de su mujer. Aseguró que desconocía que los compresores tenían que someterse a una prueba de presión y que se limitó a confiar en las instrucciones de la empresa que se encargaba del mantenimiento. Por su parte, la víctima, que actualmente tiene prótesis y está en silla de ruedas, relató que aquel día cumplió con las órdenes que le habían dicho y le explotó en compresor. A raíz de ahí tuvo que adaptar su vivienda y que actualmente aún tiene que tomar medicamentos para poder dormir.
NOTICIA EXTRAÍDA DE  DIARIO ATLÁNTICO  EN  VIGO  21/04/2015

UN EMPLEADO CIVIL DE LA ULOG-23 EN CEUTA SUFRE LA AMPUTACIÓN DE DOS FALANGES.


El paciente realizaba labores de mantenimiento cuando se produjo un aplastamiento y desgarro con sección de parte del dedo índice de su mano izquierda.

Un empleado civil de la Unidad Logística 23 (ULOG-23) ha sufrido esta mañana la amputación de dos falanges de un dedo –según Ingesa– mientras trabajaba con un compresor, ha informado hoy la Comandancia General de Ceuta.
Inmediatamente, el paciente ha sido evacuado al Hospital Universitario y permanece en el clínico de Loma Colmenar atendido por personal sanitario y su familia, a la espera de entrar en quirófano. Ingesa comunicó que el equipo médico considera inviable su reimplantación.
El trabajador, que ha sufrido el accidente laboral mientras desempeñaba su labor como PCL en el taller de vehículos de la Compañía Técnica de Mantenimiento, en las dependencias de Manzanera, responde a las iniciales J. L. N. D.
El paciente realizaba labores de mantenimiento cuando se produjo un aplastamiento y desgarro con sección de parte del dedo índice de su mano izquierda.
Al trabajador se le aplicaron las oportunas medidas de primeros auxilios, que sus compañeros estimaron en esta situación.

NOTICIA EXTRAÍDA DE EL FARO DE CEUTA 21/04/2015

lunes, 20 de abril de 2015

CONDENADO POR UN ACCIDENTE LABORAL QUE AMPUTÓ LA MANO A UN TRABAJADOR.

La juez sustituye al empresario la pena de prisión por una multa de 2.880 euros y una indemnización de 180.000

Leonardo Agustín Ganchozo rechazó los 30.000 euros que le ofreció un jefe de su empresa para que olvidara el asunto y no lo denunciara. Ganchozo, ecuatoriano de 40 años, acababa de sufrir un grave accidente laboral que obligó a amputarle la mano derecha. Ahora, tres años después de aquel suceso, sabe que cobrará aquella cantidad, pero multiplicada por seis. Y que, además, su jefe ha admitido que tuvo responsabilidad en el suceso.
Un juzgado de lo penal ha condenado a un año de cárcel a David C., responsable de la empresa, por un delito contra los derechos de los trabajadores. La sentencia, a la que ha tenido acceso EL PAÍS, considera que David C. tenía la “obligación de garantizar la seguridad de los trabajadores a su cargo” y, en cambio, permitió que el hombre manipulara una máquina “sin tener formación en prevención de riesgos laborales” y sin conocer, tampoco, “los riesgos que conllevaba su uso”. Su comportamiento, concluye, ocasionó “un grave riesgo para la integridad física” de Ganchozo, que además estaba en situación irregular en la empresa.
El accidente laboral ocurrió la tarde del 12 de diciembre de 2011 en una nave industrial de Cornellà. Ganchozo había entrado a trabajar como peón de obra un año antes para Plastics Maide, dedicada a la ignifugación. Todo ese tiempo estuvo sin contrato. Aquella tarde, debía limpiar la cámara donde se mezclan el mortero y el agua. Introdujo el brazo en la máquina de ignifugación y ésta se puso en funcionamiento “de forma sorpresiva”. Su brazo derecho quedó “atrapado” con “gran firmeza”. “Vi triturada mi mano y supe que no se podía hacer nada”, relató Ganchozo al interponer la denunciadesde el despacho de su abogado, Javier Rodrigálvarez.
La máquina se activó porque el trabajador no accionó el interruptor de parada. Ganchozo pensó que ya estaba parada cuando, en realidad, estaba atascada precisamente por la acumulación de materiales. La sentencia subraya que Ganchozo carecía de formación para manejar la máquina –“me explicaron cómo iba en diez minutos”, dijo-y por eso no pudo seguir las indicaciones de los manuales de uso. La empresa, además, “carecía de procedimiento de trabajo” para emplear esa maquinaria, una “carencia” más que generó “un riesgo previsible, grave e inminente de sufrir accidentes”.
El accidente obligó a amputarle la mano derecha, lo que le ha generado un “perjuicio estético importante” e incluso un “trastorno depresivo reactivo”, según la resolución. La juez valora todas esas circunstancias y fija la indemnización en 180.000 euros. La sentencia se dictó hace unos días de conformidad con el empresario, que aceptó ser autor de un delito contra los derechos de los trabajadores a cambio de una rebaja de la pena. En la resolución, la juez accede a sustituir la pena de cárcel por el pago de una multa de 2.880 euros.
NOTICIA EXTRAÍDA DE EL PAIS 20/ABRIL/2015

LAS MUERTES EN ACCIDENTES LABORALES DESCIENDEN UN 20% HASTA FEBRERO.

Fallecieron 76 trabajadores, lo que supone 19 menos que en 2014, año en el que la siniestralidad aumentó un 1,2%

El año ha comenzado con menos muertes en accidentes laborales. Hasta febrero 76 trabajadores fallecieron en este tipo de siniestros, lo que supone 19 menos que el año pasado. Es decir, un descenso del 20%, según datos del Ministerio de Empleo. De estos fallecimientos, un total de 60 se produjeron durante la jornada de trabajo, nueve menos que en 2014 (-13%). Los 16 accidentes mortales restantes fueron 'in itínere' -producidos en el trayecto de casa al trabajo y viceversa-, lo que también supone diez fallecidos menos que el año anterior (-38,5%). Casi la mitad de los fallecimientos (34) se produjeron por infartos o derrames cerebrales, mientras que nueve se debieron a quedar atrapado o aplastado y ocho por accidentes de tráficos.
Por contra, en estos dos primeros meses se registraron 76.225 accidentes laborales con baja, un 3,2% más que los producidos el año anterior, cuando ascendieron a 73.879. Del total de siniestros, 65.397 accidentes se produjeron en el lugar de trabajo (un 2,7% más) y 10.827 fueron siniestros 'in itínere', lo que representa un incremento del 6,4%.
Por su parte, los accidentes leves con baja en el puesto de trabajo alcanzaron los 64.854 hasta febrero, un 2,7% más, y los graves sumaron 483, un 5,7% menos. En el caso de los siniestros 'in itínere', se registraron 10.684 accidentes de carácter leve (6,8% más) y 127 de gravedad (-11,8%).
Dos de cada tres accidentes con baja en jornada de trabajo se debieron a sobreesfuerzos físicos o a choques o golpes contra objetos inmóviles. Por su parte, más de la mitad de los siniestros 'in itínere' fueron consecuencia de accidentes de tráfico.
Sin embargo, a pesar del avance en general de los dos primeros meses hay que tener en cuenta que 2014 fue un año negro en ese sentido al repuntar el número de fallecidos un 1,2% hasta los 565. También aumentaron un 3,2% las bajas laborales por algún siniestro.
NOTICIA EXTRAÍDA DE larioja.com 20/04/2015


martes, 14 de abril de 2015

LOS SINDICATOS ALERTAN DEL NUEVO REPUNTE DE ACCIDENTE LABORALES EN MÁLAGA.


Los accidentes en el ámbito del trabajo están repuntando en Málaga, algo que preocupa enormemente a los sindicatos, que achacan esta subida a la enorme precariedad en los contratos y a un cierto abandono por parte de las empresas en las inversiones en seguridad laboral. Tras seis años de caída continua en el número de siniestros, el 2013 ya marcó una ligera subida en relación al año anterior, que marcó el registro más bajo de la historia reciente (14.725). Este último 2014 ha confirmado el repunte, con 16.332 siniestros y un incremento en torno al 9%, según datos oficiales consultados por este periódico.
Lejos quedan, desde luego, los niveles de los años previos a la crisis, cuando la provincia acumuló máximos en torno a los 30.000 siniestros laborales por ejercicio, los más graves ligados al ámbito de la construcción. Lo cierto es que fue sobre todo la incidencia de la crisis, con la consiguiente salida de decenas de miles trabajadores del mercado de trabajo, la que tiró a la baja del número de siniestros.
En todo caso, la inmensa mayoría de los accidentes en 2014 fueron de carácter leve (el 98% del total), pero en el tema de la siniestralidad cualquier rebrote es motivo de máxima preocupación. La lacra de los accidentes se cobró el pasado año diez víctimas mortales (tres en el sector servicios, dos de la industria, dos de la agricultura y dos más de la construcción, además de un accidente mortal in itinere) mientras que otros 209 siniestros tuvieron carácter grave.
El responsable de Salud Laboral del sindicato Comisiones Obreras en Málaga, Juan Antonio Perles, asegura que el gran problema es que las empresas consideran la prevención como «un gasto superfluo», y más en tiempos de crisis. También critica que muchos empresarios apliquen un modelo de prevención «burocrático».
«Hacen un plan de valoración de riesgos y rellenan los papeles necesarios, pero no se implican en su cumplimiento. El Gobierno ha facilitado este modelo al permitir que las empresas de hasta 50 trabajadores puedan ocuparse por su cuenta de la prevención sin necesidad de contratar una asesoramiento especializado», explica.
Los sindicatos rechazan que la subida pueda justificarse por el aumento de afiliados a la Seguridad Social que hubo el pasado año (Málaga cerró con 512.524 cotizantes, 20.649 más que en 2013). Alegan en cambio que es precisamente el actual modelo laboral, con un gran predominio del empleo temporal y un peso creciente de los contratos por horas, lo que acrecienta el estrés y la fatiga de los trabajadores, contribuyendo al aumento de siniestros.
«Hablamos de malas condiciones laborales, jornadas inadecuadas y personal que no recibe suficiente formación en prevención. Y si te obligan a trabajar diez horas seguidas lo lógico es que te expongas más a sufrir un accidente en tu trabajo o de camino a casa», lamenta la secretaria general de UGT en Málaga, Auxiliadora Jiménez. Los sindicatos añaden que hay «miedo» entre los trabajadores a darse de baja tras un accidente laboral leve por el temor a que los despidan, por lo que acuden a trabajar aún sufriendo dolencias. «Cuanto más precaria es la situación de un trabajador, más difícil es que exija sus derechos», dicen.
¿Cuáles son las dolencias más frecuentes entre las que sí trascienden? Dolores musculares a causa de sobresfuerzos físicos, aplastamientos o caídas, cortes y colisiones son algunas de las principales causas de siniestralidad. El sector servicios –con segmentos claves como el comercio, la hostelería y el turismo–, con el 77% del total de siniestros, es el que acapara en Málaga la mayor parte de la accidentalidad, desde los siniestros que se puedan producir en las cocinas de los restaurantes al estrés de los camareros o los dolores de espalda del personal de oficinas.

Tanto CCOO como UGT denuncian «falta de cultura empresarial» y «carencia de medidas suficientes de inspección y control» ante lo que consideran una tendencia muy peligrosa. «Necesitamos más inspectores que visiten a las empresas y aseguren el cumplimiento de la Ley de Prevención. Sin embargo, en los últimos años sólo hemos visto recortes», apunta Perles. Jiménez añade que la crisis y la reforma laboral no han hecho sino contribuir a que la seguridad laboral se vea entre los empresarios como «algo accesorio».
NOTICIA EXTRAÍDA DE LA OPINIÓN DE MÁLAGA. 14/04/2015

lunes, 13 de abril de 2015

FALLECE UN HOMBRE EN UN ACCIDENTE LABORAL EN CARBALLEDA DE VALDEORRAS.

Estaba trabajando en una nave de pizarra en As Barreiras, en Riodolas
Un hombre de 31 años falleció esta mañana al sufrir un accidente laboral en la nave de pizarra en la que estaba trabajando en Riodolas, en el concello de Carballeda de Valdeorras. La alarma saltó poco después de las doce de la mañana, alertando de que había un hombre atrapado en una máquina en la nave de As Barreiras. Hasta la nave se desplazó una ambulancia medicalizada y un helicóptero del 061, pero pese al trabajo del personal sanitario, finalmente no pudieron salvarle la vida. También acudieron al lugar los GES de O Barco y los bomberos del parque comarcal de Valdeorras, así como una patrulla de la Guardia Civil. El fallecido responde a las iniciales de A.V.A.
Noticia extraída de  ABC.es   11/04/2015